Nitro

Fue el doce de agosto cuando empecé éste viaje intradimensional para el alcance de objetivos claros, contundentes y trascendentales; hasta ahora, después de un veinte como resultado al culminar el segundo mes, me sentía pleno, y la cosa se veía sencilla al ser un número menor mi objetivo a alcanzar al tercero...

¿Qué sucedió? Bueno, quiero confesar que ha sido realmente complicado llegar, de hecho, ha sucedido un par de veces que parece que me rindo antes de tiempo, que determino no poder más, que a punto me quedo del abandono; no quiero culpar o responsabilizar a nadie, si bien es cierto que hay influencias o ausencia de las mismas durante el periodo, lo que creo mayormente importante es mi comprensión enteramente designada al asunto y mi puesta a punto para la que será, la que considero, una semana de tipo "nitro".

Así es, ésta semana, que tiene minutos de haber iniciado, tiene como objetivo permitirme llegar al punto pactado inicialmente. Sé que habrá tentaciones y trabas en el asunto, que durante los días y las noches me enfrentaré a quienes están en un acuerdo parcial conmigo, proponiendo de manera vertical mi continuidad, pero atacando mi vertiginosa determinación horizontalmente de manera sutil y arrebatadora; así funciona esto, ante esta clase de retos, uno se encuentra solo contra el mundo.

Es hora de actuar, ha sido mucha la inversión centrada en beneficios futuros; claro que me ha costado, más que cualquier valor monetario ante la evolutividad, se encuentran los factores más importantes e irremplazables como el tiempo y la vida misma.

Quisiera poder hablar más al respecto, pero prefiero limitarme por el momento, quizá me limite por el resto de mi vida puesto que no son temas que me interese ventilar por aquí; y no por temor al juicio, más allá de eso, creo que incluso la publicidad juiciosa no deja de hacer su función publicitaria, y para alguien amante del hábitat entre las sombras y el desconocimiento público sería una catastrófica resolución cualquiera de las dos.

Actuar y pensar simultáneamente ha sido mi mantra reciente; he arrancado casi todo mi orgullo y ego para que mi determinación sea mayormente funcional en el proceso. Las personas probablemente en sus juicios (que no faltan) hablarán de lo fácil que se me presenta todo, que pareciera que estoy ahí justo en el momento y lugar indicado para que me toque precisamente a mí el beneficio... Que digan misa, que piensen más, yo y solamente yo conozco la cantidad de lágrimas que he derramado y la de veces que me he sentido humillado antes siquiera de tomar una decisión.

Y ni se diga del número de pruebas que he fallado; por eso mismo soy alguien que constantemente adjudico el mérito del triunfo a la estadística más que al talento o la suerte, tratando una y otra vez con todas mis fuerzas de ver andar la maquinaria sin moverla un solo centímetro; por eso soy cien porciento cabal y razonable ante los que no dejan de intentar incluso sabiendo que hay ocasiones o circunstancias que nada más no se dan.

Recordando un poco, cuando tengo una mujer como objetivo, la hago para mí la mejor persona que existe; y no con afán de exhaltarla individualmente, más allá de eso, creo que es porque me considero alguien consciente de que nosotros mismos somos dueños de nuestras decisiones; y en base a eso decidimos si alguien es excelente, estupendo, maravilloso, hermoso, o un completo fracaso. Del mismo modo que he mencionado que el éxito, el valor, la felicidad y el amor, son decisiones más allá de sentimientos o atributos.

Regresando al tema central, del que tentativamente estoy hablando, solo vengo en plan de lograrlo y no hay opción dos, no soy de mentalidad derrotista o conformista, me crié sabiendo que los límites nos los imponemos nosotros mismos, así que voy por todo y con todo lo que poseo a lograrlo; como cita mi líder: Ante la voluntad, la carne hace reverencia.

Y bien, ya es hora de dormir, otro hábito sobre el que pretendo trabajar dentro de un tiempo, pues voy en orden, no me es físicamente posible reescribir las reglas de mi vida todas de tajo y verlas cumplidas sin más, prefiero avanzar paso a paso; quién sabe, me queda el trayecto de lo que una vida representa para todos y cada uno de ellos; que bien puede ser un día o cien años.

No hay comentarios.

Publicar un comentario

Se agradecen tus comentarios.