Ella

Me fascina observar tus ojos, tu boca, tu linda cara… Eres una hermosa chica en verdad. Me veo al espejo y digo: ¿Tú qué tienes que ofrecer? No mucho… Un corazón loco, dispuesto a todo. Esa es mi mayor cualidad. Sin embargo ella, tiene muchísimo que dar, es una niña hermosa, bondadosa, la quiero mucho, quisiera en verdad poder compartir los días que me quedan vida con ella. Quisiera que pudiera tocar mi corazón con sus manos y sentir lo sensible se pone cada que estoy con ella. Quisiera que viera mis ojos llorando cuando le pido al señor por ella. Es hermosa, preciosa, tiene un corazón increíble; tal vez es lo que me conquistó de ella, su ser, su escencia… tan pura, tan limpia, tan ella. Y me miro nuevamente al espejo y digo: ¿Y tu? ¿Tu qué? ¿Qué tanto estás dispuesto a darle? No sé… No sé que tanto sea capáz de darle, lo que sí sé, es que será dueña de mi corazón. Yo no sé si sea rico, si sea pobre; no conozco mi futuro. ¡Sería muy fácil si así fuera!
Pero ella, tiene mucho que perder quizá… Quizá haya alguien más exitoso, más inteligente, más valiente, más guapo o más mucho que yo; una persona más importante, es el riezgo… Yo no le puedo ofrecer mucho por ahora, pero si está conmigo mi vida será mejor para siempre…
Tiene una mirada increíble, una sonrisa maravillosa, hecha completita por las manos de Dios; es lo único que se me ocurre decir, no existe otra forma para expresar su hermosura… y esto que yo siento por ella, creo que es amor, porque se me hace un nudo en la garganta cada que pronuncio su nombre, cada que veo su cara, cada que le hablo de frente, cada que la toco, cada que la huelo; el sentir su presencia a mi lado me transforma, me hace sentir completo, me hace sentir uno, grande, invencible, fuerte.
El tenerla a mi lado quizá es un sueño guajiro, pero es un sueño que estoy dispuesto a llevar a la realidad, es algo que yo quiero, que realmente deseo, la quiero a ella conmigo. No es tanto por la atracción física que ella me causa; sino por la atracción espiritual, la atracción intelectual, lo que su corazón me demuestra, lo que su alma es. Mi ser anhela estar cerca de su presencia, tocar su cara, sus manos, firmes y delicadas. ¡Ya no sé que tanto digo la verdad! Lo único que sé, es que esto que siento es real y me quema por dentro.
No sé en que mundo nací, imagino que es un mundo lleno de paz, lleno de tranquilidad, lleno de cosas buenas cuando está aquí conmigo, cuando compartimos momentos juntos intercambiando oraciones. Tan sólo quisiera tocar sus manos y poder estar cerca too el tiempo. ¡No sé! Eso es lo que siento ahora, quizá todo sea una obsesión, una ilusión o una alusión; no lo sé… Yo lo que sé es que esto que siento es fuerte, quema y si así es el amor, pega con tubo.
Porque aunque no lo crean me siento bien, estoy feliz… Y estas lágrimas son de alegría, no de tristeza o de melancolía. Si, si la quiero. No, no la quiero… La amo. Te amo, te amo.
Volteo para todos lados y veo su cara, dondequiera está ella, me acompaña, es increíble. me envuelve, la siento parte de mí, me pierdo en su mirada, en esos ojos cafés preciosos, hermosos; esas mejillas rositas.
Siento amor.