Habemos personas que pecamos de doblemoralistas, lo cierto es que me apena escuchar comentarios contrarios a actitudes incluso en mis más allegados amigos; pero como dice una frase de alguien que no recuerdo en este momento: "Todos fallan, menos uno mismo", es deplorable escuchar de los labios de un gran amigo la frase: "Eso no me gusta, solo quiero saber lo que se siente tener uno de esos", what?
Sí, es ridículo pensar que te avientas por algo nada más por lo que como sensaciones vaya a traerte posteriormente, lo siento, pero es una tontería; yo creo que no me atrevería a estar o hacer algo que me disgusta simplemente para ver qué se siente, pésima mentalidad.
Disfrutemos la vida caray, y ya, aceptemos que existen personas con su individualidad bien establecida (amén por quienes lo han conseguido) y quienes entre sus divagues tratan de parecer y ser alguien más, el "other-guy-wannabe"; sad sadly times.
Ya es hora de descansar un poco hoy; ah sí, la nota importante del día es que el primer paso se generó afortunadamente con éxito, a partir del lunes, comienza la siguiente fase en este exquisito proyecto de mejora. Y bueno, que cada quién viva su doblemoral como guste, a mí no dejará de parecerme algo penoso. Touché.
Habemos personas que pecamos de doblemoralistas, lo cierto es que me apena escuchar comentarios contrarios a actitudes incluso en mis más al...


Aquí guardo fragmentos de mis días: anécdotas que me han formado, pensamientos que se resisten al silencio, destellos de oraciones que encuentro en los bordes de la rutina.
Escribir, para mí, no es un oficio sino una forma de respirar. Cada texto nace del impulso de entenderme y, tal vez, de reconciliarme con el mundo.
No busco atención o aplausos; solo dejar constancia de lo que alguna vez fui, mientras sigo aprendiendo a mirar con calma.