Me estoy volviendo viejo; antes veía a las damitas de mi edad por la calle solteras y esperanzadas en encontrar a alguien. Hoy solo veo que las damas a las que me aproximo por mi edad tienen hijos, broncas matrimoniales, y si son guapas, montones de buitres encima.
Me estoy transformando en un loco; antes veía con sobriedad las cosas, y aceptaba que perdía ante los sucesos y disfrutaba cuando ganaba; ahora solo quiero estar ahí, sin importarme nada más. Las cosas que digo y hago, tienen cada vez menor relación unas con las otras; o sea, no se malinterprete, cuando me pongo objetivos regularmente los consigo; pero que me hagan creer cosas me pega mucho más que antes.
Me estoy haciendo responsable; porque antes no me importaba si alguien me cumplía o no su palabra cuando la ponía de por medio, ahora es como arrancarme la piel que alguien abuse de mi tiempo, de mi mente y supuestamente se comprometa conmigo cuando al final me diga que no, no puede, no hay modo.
Me estoy convirtiendo en amargado; porque antes me reía todo el tiempo y de todas las cosas, buenas o malas les encontraba la gracia; hoy veo a un par de tórtolos afuera y solo pienso: "carajo, y yo aquí, soltero..." Veo una hermosa mujer besando a un tipo chaparro y amorfo y pienso: "¿en serio él la ligó y yo no puedo salir de la friendzone de tantas mujeres que me han gustado en la vida?"
Y estoy evolucionando en un ser inmensamente sarcástico, crítico y realista. Si llegas hoy y me preguntas por cómo te veo, cómo te escucho, cómo creo que piensas o si no lo haces, por cómo se siente estar contigo; vas a tener una verdad seca y rotunda. Atrás quedaron muchos de los adjetivos que endulzaban a éste corazón honesto. Las razones son simples, la soledad afecta, la historia se cuenta sola.
Me estoy transformando en un loco; antes veía con sobriedad las cosas, y aceptaba que perdía ante los sucesos y disfrutaba cuando ganaba; ahora solo quiero estar ahí, sin importarme nada más. Las cosas que digo y hago, tienen cada vez menor relación unas con las otras; o sea, no se malinterprete, cuando me pongo objetivos regularmente los consigo; pero que me hagan creer cosas me pega mucho más que antes.
Me estoy haciendo responsable; porque antes no me importaba si alguien me cumplía o no su palabra cuando la ponía de por medio, ahora es como arrancarme la piel que alguien abuse de mi tiempo, de mi mente y supuestamente se comprometa conmigo cuando al final me diga que no, no puede, no hay modo.
Me estoy convirtiendo en amargado; porque antes me reía todo el tiempo y de todas las cosas, buenas o malas les encontraba la gracia; hoy veo a un par de tórtolos afuera y solo pienso: "carajo, y yo aquí, soltero..." Veo una hermosa mujer besando a un tipo chaparro y amorfo y pienso: "¿en serio él la ligó y yo no puedo salir de la friendzone de tantas mujeres que me han gustado en la vida?"
Y estoy evolucionando en un ser inmensamente sarcástico, crítico y realista. Si llegas hoy y me preguntas por cómo te veo, cómo te escucho, cómo creo que piensas o si no lo haces, por cómo se siente estar contigo; vas a tener una verdad seca y rotunda. Atrás quedaron muchos de los adjetivos que endulzaban a éste corazón honesto. Las razones son simples, la soledad afecta, la historia se cuenta sola.
Me estoy volviendo viejo; antes veía a las damitas de mi edad por la calle solteras y esperanzadas en encontrar a alguien. Hoy solo veo que ...


Aquí guardo fragmentos de mis días: anécdotas que me han formado, pensamientos que se resisten al silencio, destellos de oraciones que encuentro en los bordes de la rutina.
Escribir, para mí, no es un oficio sino una forma de respirar. Cada texto nace del impulso de entenderme y, tal vez, de reconciliarme con el mundo.
No busco atención o aplausos; solo dejar constancia de lo que alguna vez fui, mientras sigo aprendiendo a mirar con calma.