Dedicarte un sueño, cerrar los ojos
y sentir la oscuridad inmensa.
Nuestro universo cada vez más cerca,
estar contigo no es ninguna ofensa.
Tomados de las manos caminamos en el espacio,
la tierra lejos insignificante.
Seremos por siempre amigos y amantes.
Y al despertar estaré temblando,
no puedo expresar cuanta falta me haces.
Quiero que seas mi próximo invitado,
que por el siguiente de mis sueños pases.
Entra y llena mi alma de tu imagen,
oblígame a tenerte pegada a mi cabeza,
bésame como nadie jamás ha imaginado,
quiero probar tus labios sabor cereza.
Y cuando despierte de nuevo esperaré con ansia,
que una vez más la noche caiga y me llenes de tu fragancia.
y sentir la oscuridad inmensa.
Nuestro universo cada vez más cerca,
estar contigo no es ninguna ofensa.
Tomados de las manos caminamos en el espacio,
la tierra lejos insignificante.
Seremos por siempre amigos y amantes.
Y al despertar estaré temblando,
no puedo expresar cuanta falta me haces.
Quiero que seas mi próximo invitado,
que por el siguiente de mis sueños pases.
Entra y llena mi alma de tu imagen,
oblígame a tenerte pegada a mi cabeza,
bésame como nadie jamás ha imaginado,
quiero probar tus labios sabor cereza.
Y cuando despierte de nuevo esperaré con ansia,
que una vez más la noche caiga y me llenes de tu fragancia.
Dedicarte un sueño, cerrar los ojos y sentir la oscuridad inmensa. Nuestro universo cada vez más cerca, estar contigo no es ninguna ofens...



Aquí guardo fragmentos de mis días: anécdotas que me han formado, pensamientos que se resisten al silencio, destellos de oraciones que encuentro en los bordes de la rutina.
Escribir, para mí, no es un oficio sino una forma de respirar. Cada texto nace del impulso de entenderme y, tal vez, de reconciliarme con el mundo.
No busco atención o aplausos; solo dejar constancia de lo que alguna vez fui, mientras sigo aprendiendo a mirar con calma.