Lo último en lo que pienso, eres tu amor mío,
tu delicada piel que me permite atravesar sin miedo cualquier valle sombrío,
morar en la casa del enemigo sin miedo alguno a ser destruido,
despertar hasta tarde confiado en que está comprado mi destino.
Noches tranquilas y días sin miedos me esperan afuera,
porque he comprendido que la belleza de tu compañía mi alma impera.
Soberana de mis besos y caricias serás mi vida entera,
y nunca llegará el final junto a tu exquisitez sincera.
tu delicada piel que me permite atravesar sin miedo cualquier valle sombrío,
morar en la casa del enemigo sin miedo alguno a ser destruido,
despertar hasta tarde confiado en que está comprado mi destino.
Noches tranquilas y días sin miedos me esperan afuera,
porque he comprendido que la belleza de tu compañía mi alma impera.
Soberana de mis besos y caricias serás mi vida entera,
y nunca llegará el final junto a tu exquisitez sincera.
Lo último en lo que pienso, eres tu amor mío, tu delicada piel que me permite atravesar sin miedo cualquier valle sombrío, morar en la cas...



Aquí guardo fragmentos de mis días: anécdotas que me han formado, pensamientos que se resisten al silencio, destellos de oraciones que encuentro en los bordes de la rutina.
Escribir, para mí, no es un oficio sino una forma de respirar. Cada texto nace del impulso de entenderme y, tal vez, de reconciliarme con el mundo.
No busco atención o aplausos; solo dejar constancia de lo que alguna vez fui, mientras sigo aprendiendo a mirar con calma.